Los cambios alimenticios a lo largo de los últimos años hacia un mayor consumo de carnes rojas y alimentos procesados han llevado a ciertas instituciones del ámbito de la salud a emprender iniciativas y tomar decisiones para intentar revertir esta situación.
En este sentido, datos del Estudio Nacional de Nutrición y Alimentación (ENNA-1) afirman que desde la década del 1960 hasta la actualidad el consumo de legumbres en España ha caído un 50%. "Mientras que antes este alimento se consumía casi a diario, el estudio concluye que actualmente solo se come una vez a la semana, una tendencia que consideramos preocupante" explica el Dr. José Luis Palma, vicepresidente de la Fundación Española del Corazón (FEC).
En este contexto, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha proclamado el año 2016 como el Año Internacional de las Legumbres, una iniciativa a la que se ha sumado la FEC, y que cuenta con un doble objetivo: por una parte, concienciar a la población sobre las ventajas nutricionales de este alimento para mejorar la salud de la población, y por otra, promocionar su cultivo y su consumo. Tal y como cuenta el Dr. Palma, "las propiedades de las legumbres son altamente beneficiosas no solo para la salud cardiovascular, sino también para prevenir otras patologías como el cáncer o la diabetes. Además, su consumo en cualquier mes del año, así como su fácil conservación y cultivo, contribuyen favorablemente a su consumición".
Las múltiples propiedades de las legumbres, entre ellas las cardiovasculares, han sido objeto de análisis a través de distintos estudios. Para proteger nuestro corazón, la FEC ya anunció a través de un estudio que la ingesta de legumbres reduce el riesgo cardiovascular, puesto que disminuye los niveles de colesterol LDL. Más concretamente, la investigación afirmó que cuatro raciones semanales de 100 gramos de legumbres reducen en un 14% el riesgo de sufrir cardiopatía isquémica (infarto de angina o de pecho).
Otros trabajos reafirman esta conclusión. En este caso, investigadores de la Universidad de Toronto afirmaron que aquellas personas que comen legumbres una vez al día (130g/día) durante una media de seis semanas, reducen significativamente los niveles de colesterol LDL en 0,17mmol/L, lo que equivale a una reducción del 5% del colesterol "malo" respecto al punto de partida de los participantes. Esto conlleva una reducción potencial de muerte por enfermedad cardiovascular de entre el 5 y el 6%.
A raíz del Año Internacional de las Legumbres, la FEC quiere recordar que las legumbres conforman una parte esencial de la dieta mediterránea gracias a sus propiedades altamente beneficiosas. Contienen:
- Bajo contenido en grasas (a excepción de la soja, los cacahuetes y los altramuces)
- Hidratos de carbono de lenta absorción (en torno al 55%) y por tanto, de bajo índice glucémico, "lo cual beneficia a los pacientes con síndrome metabólico con riesgo cardiovascular o diabetes, ya que ayudan a controlar los niveles de glucosa", explica el Dr. Palma
- Fibra (11-25% de su contenido) que ayuda a controlar el colesterol –puesto que impide la absorción de las grasas saturadas-, mejora el tránsito intestinal y además previene de la absorción excesiva de hidratos de carbono
- Antioxidantes (polifenoles, fitoesteroles o isoflavonas) que protegen el endotelio y por tanto, previenen de las enfermedades cardiovasculares
- Ricas en proteínas (17-25% de la composición total)
- Micronutrientes, minerales (calcio, hierro y magnesio) y vitaminas del grupo B que ayudan a regular el metabolismo interno
Por los múltiples beneficios que aportan las legumbres, los especialistas recomiendan consumir entre dos y cuatro raciones a la semana, entendiendo por una ración 70g de producto en crudo (un plato normal individual de legumbre cocida), ya sea:
- Guisante verde: aporta gran cantidad de vitamina C y hierro. Es un alimento adecuado para las mujeres con ferropénica (disminución de hierro en el organismo)
- Lentejas: contienen proteínas ricas en aminoácidos esenciales. Combinadas con el arroz, se complementan constituyendo un alimento básico para los vegetarianos, ya que sustituyen a la carne, la leche o los huevos
- Garbanzos: contienen tanto calcio como el queso y sus proteínas son las de más alto nivel nutritivo
- Soja: contiene una variedad de proteínas muy completa y presenta unas sustancias llamadas fitoestrógenos que actúan como antioxidantes y que son capaces de regular los niveles hormonales de las mujeres
- Habas: tienen un alto contenido en vitamina C, así como carbohidratos
Más allá de los beneficios evidentes para la salud de la población, el Dr. Palma considera que, "las legumbres son una forma sencilla y barata de comer sano, fáciles de preparar y gastronómicamente versátiles que pueden acompañar ensaladas o guisos. Además, contribuyen a la sostenibilidad del planeta ya que aumentan la fertilidad del suelo donde crecen y se conservan sin refrigeración, lo que reduce el consumo de recursos naturales".
Con el Año Internacional de las Legumbres, "desde la Fundación Española del Corazón nos comprometemos a potenciar y a tratar de llevar a la población las bondades de las legumbres y sus propiedades cardiovasculares", concluye el experto.