Por su alto contenido en colesterol, históricamente se ha relacionado a la ingesta de huevo con un aumento del riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular, pero la Fundación Española del Corazón (FEC) pretende modificar esta creencia, en base a los resultados obtenidos por diversos estudios que no solo no han encontrado una relación directa entre su consumo y el aumento de cardiopatías, sino que también señalan que existen numerosos beneficios de este alimento en nuestra salud.
Así, la investigación Egg consumption and risk of coronary heart disease and stroke: dose-response meta-analysis of prospective cohort studies, un meta-análisis basado en ocho estudios y cuyos resultados han sido publicados en el British Medical Journal, demuestra que no existe una relación entre el consumo de un huevo al día y el aumento del riesgo cardiovascular en comparación con la ingesta de un máximo de tres huevos a la semana.
Otro estudio, el HELENA, elaborado por el Departamento de Educación Física y Deportiva de la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad de Granada, ha concluido tras analizar a 380 adolescentes, que no existe una asociación entre la ingesta de huevo y el perfil lipídico, la adiposidad, la resistencia a la insulina, la tensión arterial, la capacidad aeróbica o el índice de riesgo cardiovascular en los sujetos estudiados.
"Es cierto que el huevo contiene colesterol (200 mg la unidad), pero es bajo en grasas saturadas", explica el Dr. Leandro Plaza, presidente de la FEC. "La hipercolesterolemia en un producto se valora según el balance entre las grasas saturadas y las insaturadas y el huevo contiene un 3,6% de ácidos grasos insaturados, un 1,6% de poliinsaturados y únicamente un 2,8% de grasa saturada, por lo que esta prácticamente no afecta a los niveles de colesterol en sangre".
El huevo es fuente de muchos componentes necesarios en nuestra dieta y beneficiosos para nuestro organismo. Es el caso de la vitamina A (100 g de parte comestible aportan un 28,4% de la cantidad diaria recomendada) vitamina D (36%), vitamina E (15,8%), riboflavina (26,4%), niacina (20,6%), ácido fólico (25,6%), vitamina B12 (84%), biotina (40%), ácido pantoténico (30%), fósforo (30,9%), hierro (15,7%), cinc (20%) y selenio (18,2%), según datos del Instituto de Estudios del Huevo.
Dos huevos aportan unas 141 kcal, que representan el 7% de la energía diaria recomendada en el adulto, que son 2000 kcal. Al no contener hidratos de carbono, esta energía proviene fundamentalmente de su materia grasa.
"Todos estos beneficios nutricionales hacen del huevo un alimento necesario, que permite ingerir una buena cantidad de energía sin consumir las dañinas grasas saturadas. Así, La Fundación Española del Corazón no considera necesario restringir el consumo de huevos en la dieta de las personas sanas", informa el Dr. Plaza. "Una buena salud cardiovascular se consigue a través de unos buenos hábitos de vida, siguiendo una dieta equilibrada y practicando ejercicio físico de forma regular", concluye el presidente de la Fundación Española del Corazón.