La principal diferencia entre razas reside en su distinta prevalencia de los factores de riesgo.
La principal diferencia entre razas reside en su distinta prevalencia de los factores de riesgo.
La raza como factor de riesgo cardiovascular
Por ejemplo, numerosos estudios apuntan una mayor disposición de las personas de raza negra a padecer hipertensión arterial. Además, parece demostrado que su incidencia tiene peor pronóstico en este grupo de población. Otras investigaciones han descubierto que en los países asiáticos se da un mayor riesgo de ictus y uno más bajo de infarto de miocardio.
La mayor o menor presencia de enfermedades cardiovasculares en diferentes etnias se debe en gran medida a la diferente prevalencia genética de enfermedad. Asimismo, el distinto impacto de estas patologías entre las razas también es consecuencia de las costumbres alimentarias y la actuación de otros factores de riesgo.
Cómo prevenir su incidencia
La raza no es un factor modificable, pero siempre podemos actuar sobre otros elementos que nos ayudarán a reducir la probabilidad de padecer una dolencia cardiovascular.
En algunos casos es difícil distinguir si el mayor impacto de las enfermedades del corazón en determinada raza se debe a aspectos genéticos o a factores socioculturales o ambientales.