Cada año, entre 110.000 y 120.000 personas sufren un ictus en España. Y de ellos, un 50% quedan con secuelas discapacitantes o fallecen. Son datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN), que recuerda que el ictus es la segunda causa de muerte en España (la primera en mujeres), la primera causa de discapacidad adquirida en el adulto y la segunda de demencia.