Los cardiólogos no se cansan de repetirlo: controlar los factores de riesgo cardiovascular es una medida muy eficaz para evitar la aparición de la enfermedad cardiaca. Y cuanto antes comencemos a ejercer ese control, más garantías obtendremos. Los niños no están excluidos de esta recomendación: la obesidad y el sedentarismo, dos de esos factores de riesgo que está en nuestra mano...