Personas de edad avanzada, hipertensos y pacientes con otros problemas cardiológicos pueden padecerla. También los jóvenes pueden sufrir la llamada “arritmia del sábado noche”.
Personas de edad avanzada, hipertensos y pacientes con otros problemas cardiológicos pueden padecerla. También los jóvenes pueden sufrir la llamada “arritmia del sábado noche”.
Definición de la fibrilación auricular
La fibrilación auricular (FA) es la arritmia (alteración del ritmo cardiaco) más frecuente. Se produce cuando se altera la secuencia de activación del corazón y una parte del mismo (las aurículas) mandan al resto del corazón múltiples estímulos de forma irregular. Como consecuencia de estos estímulos, el corazón se acelera y pierde la regularidad.
Esta arritmia puede ser transitoria (FA paroxística) y desaparecer espontáneamente o persistente. Para su diagnóstico únicamente es necesario un electrocardiograma.
Factores que favorecen su aparición
La fibrilación auricular es más frecuente en personas de edad avanzada, en hipertensos y en pacientes con otros problemas cardiológicos como pueden ser las enfermedades de las válvulas, especialmente la estenosis mitral. En personas jóvenes esta arritmia se asocia al consumo de alcohol, por ello también se llama la “arritmia del sábado noche”
Efectos sobre el corazón
Por lo general la principal consecuencia sobre el corazón es la aceleración del ritmo cardiaco, apareciendo en reposo frecuencias cardiacas superiores a 100 lpm. Además se pierde la sincronía de la contracción, apareciendo un pulso irregular. Aunque en general se trata de una arritmia “benigna”, si la frecuencia cardiaca se acelera demasiado o la arritmia aparece en un paciente con cardiopatía previa (insuficiencia cardiaca, cardiopatía isquémica, hipertensión no controlada etc), pueden producirse consecuencias peligrosas.
Otros problemas derivados de la arritmia
El segundo problema que plantea esta arritmia es la predisposición a que se formen trombos dentro del corazón, incrementándose el riesgo de embolias, especialmente el riesgo de padecer un accidente vascular cerebral.
Síntomas de la fibrilación auricular
La mayoría de veces esta arritmia no produce ningún síntoma. El síntoma más frecuente es la aparición de palpitaciones. Menos frecuente es la aparición de sensación de falta de aire o dolor en el pecho.
Tratamiento de fibrilación auricular
Hay dos opciones de tratamiento: control del ritmo o control de la frecuencia cardiaca.
Control del ritmo
El control del ritmo consiste en intentar revertir la arritmia hacia el ritmo normal del corazón, mediante el uso de fármacos antiarrítmicos o de una cardioversión eléctrica. A pesar de conseguir el ritmo normal, la tasa de recurrencia en ocasiones es elevada.
Control de la frecuencia cardiaca
El control de la frecuencia cardiaca consiste en mantener la arritmia de forma controlada, es decir, utilizando fármacos que reducen la frecuencia cardiaca. Las dos opciones de tratamiento son igual de eficaces, es decir, se puede vivir perfectamente con la arritmia si está controlada.
No hay que olvidar que en ambas opciones de tratamiento hay que prevenir la aparición de trombos mediante el uso de anticoagulantes.
Otras recomendaciones
Es importante en pacientes con fibrilación auricular controlar el resto de factores de riesgo, especialmente la hipertensión arterial. También hay que reducir los estimulantes como el tabaco y el café y evitar el consumo de alcohol.
Si la frecuencia cardiaca no está controlada (frecuencia cardiaca en reposo > 100 lpm) debe consultar a su médico ya que si se mantienen estas frecuencias durante un periodo largo de tiempo puede acabar afectando a la fuerza del corazón.
Ficha Paciente: Fibrilación Auricular