La Fundación Española del Corazón (FEC) ofrece algunas recomendaciones para mantener un corazón sano durante el verano, pues, a lo largo de esta época, solemos adoptar nuevas costumbres poco beneficiosas para nuestra salud cardiovascular.
Por todos es sabido que, durante la época estival, es importante practicar ejercicio evitando las horas centrales del día, mantenernos hidratados para compensar la pérdida de líquido causada por el sudor y no excedernos con la dieta, controlando la ingesta de sal, grasas y azúcares, así como aumentar el consumo de frutas y verduras. De lo contrario, nuestro corazón puede sufrir descompensaciones, y especialmente el de aquellos que ya padecen alguna enfermedad cardiovascular.
No obstante, algunos de los hábitos veraniegos que a priori nos parecen muy saludables, como dormir en exceso, tanto durante la noche como durante el día, pueden resultar igualmente peligrosos para nuestra salud cardiovascular.
Un estudio realizado por el West Virginia University School of Medicine analizó a 30.397 adultos que respondieron a una encuesta sobre sus hábitos de descanso diarios y su salud cardiovascular. De la investigación se extrajo que, aquellos que dormían cinco horas o menos presentaban un riesgo dos veces mayor de desarrollar problemas cardiovasculares en comparación con los participantes que descansaban siete horas. Pero sorprendentemente, aquellos que dedicaban nueve o más horas diarias al sueño también aumentaron 1,57 veces su riesgo cardiovascular respecto a los que dormían las horas recomendadas.
“Dormir poco activa factores metabólicos y endocrinos perjudiciales para la salud”, comenta el Dr. Lorenzo Silva Melchor, miembro de la FEC y cardiólogo de la Unidad Coronaria del Hospital Universitario Puerta de Hierro de Madrid, “por el contrario, el dormir más horas de las recomendadas puede relacionarse con disturbios y calidad del sueño que condiciona alteraciones de parámetros cardiovasculares”, apunta el especialista.
Otros consejos que la FEC ofrece a los cardiópatas durante las vacaciones son: procurar acordarse de seguir tomando la medicación adecuada a pesar del cambio de rutinas y viajar siempre con la dosificación apuntada y con un informe médico actualizado por si se padece alguna descompensación fuera de casa y el enfermo debe ser atendido por otro cardiólogo.