Existe extensa evidencia científica, entre los estudios más destacados, Predimed, que demuestra que la dieta mediterránea es la que mayores beneficios aporta a nuestra salud, y así se ha ido transmitiendo a la población desde hace años mediante campañas educacionales. Acordarse de su composición es sencillo: cereales, fruta y verdura, lácteos, aceite de oliva, pasta y legumbres, pescado y consumo ocasional de carne roja. Sin embargo, las crecientes tasas de sobrepeso y obesidad delatan que la población española sigue sin adaptar su dieta a estas recomendaciones. ¿Qué es lo que está fallando?
La Fundación Española del Corazón (FEC) ha querido indagar para descubrir los motivos, llevando a cabo el estudio 'Mitos y Errores en Alimentación en la población española', que se ha presentado esta mañana en la Casa del Corazón.
El estudio, realizado en una muestra de 500 personas mayores de 40 años (cuando empieza a aumentar el riesgo cardiovascular), concluye que uno de cada cinco españoles considera que su dieta merece un suspenso (18%). Este dato ha llevado a la FEC a reclamar más consejos nutricionales de manera frecuente a la población por parte de los profesionales (médicos, dietistas-nutricionistas, entrenadores deportivos...), una iniciativa con la que está de acuerdo el 70% de los encuestados.
En esta línea, el estudio también evidencia que el 53% de los participantes afirma no tener suficiente información nutricional en el etiquetado de los productos, lo que puede llevar a decisiones erróneas sobre la idoneidad de su alimentación.
El análisis también desvela que aunque el 83% de los encuestados sabe que el pescado azul es fuente de omega 3, solo el 47% asocia el consumo de omega 3 con beneficios cardiovasculares. El pescado azul, al tener mayor cantidad de grasa, contiene mayor concentración de ácidos poliinsaturados omega-3, ácido docosahexaenoico (DHA) y ácido eicosapentaenoico (EPA). La Dra. María Elisa Calle, coordinadora del programa del Programa de Alimentación y Salud de la FEC y profesora de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Complutense de Madrid, explica que, "el DHA es un componente habitual de las membranas y participa en el desarrollo del sistema nervioso central. Además, tiene efecto beneficioso en la función endotelial (a nivel de la pared interna vascular) y mejora el perfil lipídico, fundamentalmente aumentando los niveles de colesterol bueno, denominado HDL. Por su parte, el EPA es un ácido graso que tiene cierta actividad antitrombótica, por lo cual disminuiría de forma discreta el riesgo de trombosis".
Precisamente, los datos de este estudio se centran en un intervalo de población con mayor riesgo cardiovascular. Tal y como explica la Dra. Calle, "a partir de los 40 años comienza a aumentar el riesgo de cardiopatía isquémica, principalmente en los varones, y en la mujer el riesgo se inicia a partir de los 50 años, cuando empieza a disminuir la protección debida a estrógenos".
La encuesta permite entrever unas costumbres preocupantes en este sector de la población sobre su alimentación. Sus dietas no están equilibradas debido al bajo consumo de pescado azul, verdura y al exceso de azúcares, especialmente en el grupo encuestado más joven.
Ante estos datos, el Dr. Carlos Macaya, presidente de la FEC, explica que, "la muestra analizada, a pesar del sesgo de edad, permite ver que, en general, la población española está bien formada sobre alimentación y conoce los alimentos más beneficiosos, especialmente la población mayor, pero sin embargo, en la práctica esta realidad deja de existir".
Ante la imposibilidad de algunas personas de poder seguir una dieta saludable, para completar su dieta en estos casos, el 70% de los encuestados estaría dispuesto a incluir suplementos alimenticios como medida de prevención de salud y en casos de dieta desequilibrada.
"Nuestro objetivo como fundación", ha explicado el Dr. Macaya, "es educar a la población sobre qué hábitos de vida debe seguir para prevenir las enfermedades del corazón. Es muy importante poner sobre la mesa las dificultades que tenemos los españoles para seguir una dieta saludable. La FEC, además, organiza este mes la 32ª edición de Semanas del Corazón, con actividades especiales durante los próximos días en Madrid, León, Gijón, Valencia, Zaragoza, Álava, La Rioja, Bilbao, Huércal-Overa y Alcobendas y donde aquellos que se acerquen, además de recibir consejos sobre alimentación, también podrán realizarse pruebas gratuitas de medición del riesgo cardiovascular".
La Semana del Corazón de Madrid, que se inaugurará el próximo 23 de septiembre, también acogerá, el sábado 24, la VII Carrera Popular del Corazón.
Puedes consultar el estudio completo aquí