La Red es el lugar ideal para el comercio de algunos fármacos que se venden como la panacea contra enfermedades. Esta práctica pone en riesgo la salud de quien los consume, ya que en la mayoría de los casos se trata de productos falsificados sin ningún tipo de control sanitario.
Una persona que busca desesperadamente la solución a una dolencia tiene en Internet una despensa con una amplísima oferta de fármacos para casi cualquier tipo de enfermedades: antihipertensivos, anticonvulsivos, antidepresivos, tratamiento para el colesterol, el cáncer, el sida o la disfunción eréctil… Sin embargo, aunque la gran mayoría se publicitan como medicamentos que garantizan efectividad y vienen avalados por comentarios de usuarios 'satisfechos' con sus resultados, según informa la Organización Mundial de la Salud, en más del 50% de los casos se ha comprobado que los productos adquiridos a través de sitios webs sin domicilio social declarado, son falsificaciones tanto de marcas registradas como de genéricos.
España, un gran mercado
En 2010, la farmacéutica Pfizer publicó los resultados Cracking Counterfeit Europe, un informe sobre medicamentos en que se estimaba que este mercado ilícito “puede superar en España los 1.500 millones al año, lo que representa el 14,3% del total del mercado negro europeo, que se cifra en 10.500 millones de euros”. Según este estudio, “casi un tercio (29,8%) de los 1.000 españoles encuestados reconocía haber comprado medicamentos de prescripción a través de prácticas inadecuadas o ilícitas”. Las cifras de ventas sitúan a España en la cuarta posición del ránking de los países de Unión Europea que compran más fármacos a travás de esta vía.
Un riesgo para la salud
Hay que recalcar que estos productos falsificados que se suministran a través de Internet tienen importantes riesgos para la salud, debido entre otras cosas a que:
- No tienen el control de calidad realizado por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, que garantiza la vigilancia de todo el proceso de fabricación de los productos farmacéuticos comercializados en el país.
- No cuentan con la prescripción ni el seguimiento médico necesario.
Otro punto a tener en cuenta, y que destaca la Alianza Europea para el Acceso Seguro a los Medicamentos, es que aunque estos fármacos comercializados en Internet resulten ser auténticos “pueden haber sido reenvasados, almacenados o transportados de forma incorrecta, o pueden traer un prospecto en otro idioma; todo esto puede contribuir a confundir a algunas personas y hacer que no tomen correctamente los medicamentos que les han recetado”.
Desde la FEC, insistimos en la importancia de que las personas compren los medicamentos de forma segura por tres motivos fundamentales:
- Las farmacias autorizadas son siempre el mejor lugar para adquirirlos.
- Los médicos especialistas tienen que ser los responsables de su prescripción.
- Los profesionales de la salud son también quienes deben hacer seguimiento de la evolución del tratamiento.
¿Qué opinas tú sobre la venta de fármacos online? ¿Alguna vez has adquirido un medicamento a través de la Red? Haznos llegar tu opinión.