La presión arterial alta durante el embarazo puede elevar el riesgo de padecer enfermedad cardiaca, enfermedad renal y diabetes tras el parto, según un estudio. Los hábitos saludables y el control médico son claves para mantener a raya este factor de riesgo cardiovascular.
Las mujeres que tienen presión arterial alta durante el embarazo pueden tener un mayor riesgo de desarrollar enfermedad cardiaca, enfermedad renal crónica y diabetes. Esto es lo que concluye un estudio publicado recientemente en la revista Circulation. En esta investigación se analizaron las formas menos graves de hipertensión arterial, que son mucho más comunes en mujeres embarazadas. Durante 40 años, los investigadores siguieron a más de 10.000 mujeres finlandesas que tuvieron un bebé en el año 1966, y calcularon el riesgo de desarrollar enfermedad cardiaca o renal o diabetes en la edad adulta entre las mujeres con presión arterial alta durante el embarazo, comparándolas con las mujeres gestantes con presión arterial normal.
Entre los resultados del estudio destaca que las mujeres con presión arterial alta durante el embarazo tenían un 14% de riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares a lo largo de su vida, en comparación con las que presentaban presión arterial normal. Además, estas mujeres tenían de 2 a 5 veces más probabilidades de morir de un ataque al corazón que las que presentaban presión arterial normal. Asimismo, las mujeres que tenían presión arterial alta durante el embarazo presentaban de 1,4 a 2,2 veces más de riesgo de tener diabetes en la edad adulta.
Los autores concluyen que la presión arterial elevada durante el embarazo, independientemente del tipo e incluso sin tener factores de riesgo conocidos, eleva el riesgo de enfermedad cardiovascular, enfermedad renal crónica y diabetes mellitus. La vigilancia clínica, la evaluación de los factores de riesgo, y la intervención temprana podría beneficiar a las mujeres con hipertensión en el embarazo.
Hipertensión: cómo prevenirla y tratarla
El seguir hábitos de vida saludable durante el embarazo es fundamental tanto para el buen desarrollo del bebé como un correcto estado de salud de la mujer. La dieta, la actividad física, evitar el tabaquismo y el alcohol, así como llevar un estricto control médico, son claves para llevar un buen embarazo. Así que si quieres mantener unas buenas cifras de tensión arterial recuerda:
- No fumes. El tabaco aumenta la presión arterial y la frecuencia cardiaca. Además, su efecto negativo también incide en la salud del feto.
- Evita el consumo de bebidas alcohólicas durante el embarazo, el alcohol incrementa la presión arterial y también tiene efectos negativos para el desarrollo del feto.
- Ejercítate. La realización de ejercicio físico a diario ayuda a disminuir las cifras de presión arterial, ayuda a controlar el peso y a reducir el riesgo cardiovascular. Aquí encontrarás información más amplia sobre el ejercicio más adecuado para las embarazas y varios muy consejos útiles.
- Lleva una dieta cardiosaludable. Consume al menos 3 piezas de frutas al día. Lávalas bien para evitar cualquier riesgo de toxoplasmosis. Incluye vegetales en comida y cena, para asegurar un aporte adecuado de fibra y vitaminas. Evitar el café y las bebidas carbonatadas. Evita las grasas grasas saturadas, presentes en lácteos enteros, quesos grasos, carnes grasas, piel de pollo, tocino, mantequilla, nata, bollería y pastelería. Decántate por las grasas insaturadas, presentes en el aceite de oliva y de semillas, pescados y en los frutos secos.
- Controla tu peso. El sobrepeso es una causa de hipertensión.
- Respeta los controles y sigue al pie de la letra las indicaciones de tu médico.
Ya lo sabes, la prevención es clave para el control de los factores de riesgo. Durante el embarazo sé más cuidadosa y haz de los hábitos saludables tu rutina.