Pregunta: Cuando era joven, aunque comiese mucho, lograba mantenerme muy delgada sin ningún problema. No obstante, a raíz de una operación de tiroides que me realizaron cuando tenía 26 años, empecé a padecer una alarmante tendencia a engordar. Ahora tengo 60 años y vigilo mucho mi alimentación, pero siempre termino recuperando los kilos que pierdo con el esfuerzo de la dieta. ¿Podéis aconsejarme algún tipo de evaluación para mi caso? Mª Luisa (Las Palmas).
Pregunta: Cuando era joven, aunque comiese mucho, lograba mantenerme muy delgada sin ningún problema. No obstante, a raíz de una operación de tiroides que me realizaron cuando tenía 26 años, empecé a padecer una alarmante tendencia a engordar. Ahora tengo 60 años y vigilo mucho mi alimentación, pero siempre termino recuperando los kilos que pierdo con el esfuerzo de la dieta. ¿Podéis aconsejarme algún tipo de evaluación para mi caso? Mª Luisa (Las Palmas).
Respuesta: Te recomendamos visitar a un especialista endocrinólogo para que diseñe un tratamiento personalizado. Solo así podrás controlar la medicación para tu problema de tiroides y llevar una dieta adecuada que te facilite la pérdida de peso. También te aconsejamos una serie de hábitos alimenticios:
- Elige alimentos bajos en grasa y azúcar.
- Distribuye los alimentos en cinco comidas diarias: desayuno, media mañana, comida, merienda y cena.
- No picotees entre comidas. Evita las comidas abundantes.
- Come sentada, despacio y masticando bien los alimentos. No hagas otras actividades al mismo tiempo (ver la televisión, leer, caminar, etc.).
- Consume cinco raciones de frutas y verduras al día.
- Aumenta la ingesta de pescados.
- Bebe abundante agua: entre 1,5 y 2 litros al día.
- Restringe el consumo de alimentos fritos o precocinados con excesiva grasa.
- Realiza ejercicio físico de forma regular.