Con la vuelta a la rutina regresan las prisas, el estrés... y los "desayunos exprés": un vaso de leche y a correr. Es un error. Desayunar bien y tomarse su tiempo para hacerlo es el mejor seguro de vida para la salud.
Solo el 7,5% de los niños españoles desayuna correctamente. El dato es del Ministerio de Sanidad. Pero la 'letra pequeña' es aún peor. Uno de cada cinco niños y adolescentes solo toma un vaso de leche antes de salir de casa. El 56% solo la acompaña con productos con un altísimo porcentaje de hidratos de cabono (bollos industriales, generalmente). Y la mitad de ellos dedican menos de diez minutos a la comida más importante del día. Un drama alimenticio y de salud.
Porque, efectivamente, el desayuno debe ser la comida principal del día. Y en él se deberían ingerir una cuarta parte de las calorías que necesitamos cada día. Un buen desayuno, uno que sea equilibrado, debe estar compuesto, al menos, por leche, frutas o zumos naturales e hidratos de carbono. Y, a la vista de las cifras, la mitad de los niños y adolescentes españoles no lo toman. O lo toman mal. Es decir, su desayuno dista mucho de ser el ideal.
Eso está implicando, según los expertos en nutrición, un aumento de la obesidad infantil. Y eso, en un país como España, en el que el 33% de los chicos de entre 2 y 17 años ya padece sobrepeso u obesidad, según datos de la Agencia Española de Salud Alimentaria, es un problema grave. "Uno de los factores de esta situación –explica la profesora Ascensión Marcos, vicepresidente de la Sociedad Española de Probiótica y Prebióticos (SEPyP)– es la falta de adherencia a la dieta mediterránea y la omisión del desayuno".
¿Por qué es importante desayunar bien?
Cuando un niño no desayuna bien, no tiene la energía y la vitalidad necesarias para afrontar el esfuerzo físico e intelectual que le exigen las actividades escolares. Además, un desayuno no adecuado hace que los niños sientan hambre a media mañana y que busquen un aporte energético que, por lo general, encuentran en productos con un alto contenido en azúcar y ácidos grasos, como la bollería industrial y productos similares, directamente relacionados con la epidemia de sobrepeso y obesidad infantil que padecemos en España.
¿Cuál es el desayuno ideal?
En muchas ocasiones, por la falta de tiempo, algunas familias prescinden de dar de desayunar a sus hijos en casa antes de ir al colegio. O lo hacen rápido y mal. Es un error. Hay que desayunar bien en casa y tomarse su tiempo. Si no queda más remedio, otra alternativa es el desayuno en el colegio, cuyo menú suele estar controlado por nutricionistas.
En cualquier caso, el desayuno ideal debe ser variado y nutricionalmente equilibrado: lácteos, hidratos de carbono, grasas, vegetales o frutas, y proteínas. Cuando aporta al menos alimentos de tres de estos grupos, con toda seguridad contribuirá a que los niños tengan más energía y más fuerza para desarrollar las actividades escolares. Y todo es una cuestión de hábito: si, desde pequeños, los niños se acostumbran a desayunar bien, se sentirán mejor, rendirán más en el cole y sus padres estarán previniendo la plaga del siglo XXI: la obesidad infantil.
Siete ideas saludables para el desayuno
1. Un vaso de leche. Dos rebanadas de pan con aceite. Una loncha de jamón serrano. Una naranja.
2. Un vaso de leche con miel. Dos tostadas de pan integral con queso fresco. Dos mandarinas.
3. Un vaso de leche con cacao. Cuatro galletas. Una manzana.
4. Un vaso de leche. Dos tostadas integrales con aceite y tomate. Una pera.
5. Yogur azucarado con copos de cereales. Un plátano. Un zumo de naranja natural.
6. Un vaso de leche con azúcar. Una tostada con mantequilla y mermelada. Un zumo de melocotón.
7. Un vaso de leche con cacao. Dos magdalenas. Un kiwi.
Artículo publciado por Mrecedes Parra en el número 114 de la revista Salud y Corazón.