Se calcula que el tabaco está relacionado con casi tres decenas de problemas de salud. Entre ellos, la enfermedad cardiovascular, primera causa de muerte en nuestro país. Por eso dejar este hábito tan nocivo para el organismo -solo en España el tabaco mata a más de 60.000 personas cada año- es clave para mantenernos sanos.
Lo confirman datos como que es la primera causa de muerte por enfermedades evitables en el planeta, con nada menos que cinco millones de fallecidos cada año por culpa de este hábito que también afecta a los fumadores pasivos, quienes suman 600.000 muertes cada año. De ahí la insistencia del colectivo médico en la lucha contra el tabaco.
Con el objetivo de concienciar a la población de los beneficios que proporciona abandonar el hábito y animar a los fumadores a dejar el tabaco, la Organización Mundial de la Salud promueve desde hace 28 años el Día Mundial Sin Tabaco, que se celebra cada 31 de mayo con una campaña. Este año se centra en un llamamiento a todos los países para que se preparen para el empaquetado neutro, “una importante medida de reducción de la demanda que disminuye el atractivo de los productos de tabaco, restringe el uso de los paquetes de tabaco como soportes para publicitar y promover el tabaco, limita el empaquetado y etiquetado engañosos y aumenta la eficacia de las advertencias sanitarias”, explica la OMS en su comunicado. Se trata de seguir el ejemplo que ya puso en marcha Australia hace cuatro años y que más recientemente imitaron Irlanda, Reino Unido y Francia.
¿Qué efecto tiene el tabaco en nuestro organismo?
Uno de los principales riesgos del consumo de tabaco es que puede producir infartos de miocardio, además de incrementar las posibilidades de sufrir cáncer de pulmón y otros tipos de cáncer. Sin contar con que el hábito de fumar provoca otros daños de los que no somos conscientes porque no solemos sentir sus síntomas hasta que se presenta la enfermedad. Entre ellos, la aceleración de la ateroesclerosis, un proceso de degeneración de las arterias que se ve adelantado por fumar.
La relación entre el hábito de fumar y la aparición de la enfermedad cardiovascular es tan estrecha que desde que se puso en marcha la ley del tabaco en nuestro país se ha logrado una reducción del 11% en los ingresos hospitalarios debidos a infartos de miocardio.
Beneficios de abandonar el tabaco
- Reduce la tasa de reinfarto y muerte súbita entre un 20% y un 50%.
- Tres años después de haber dejado el tabaco, el riesgo de infarto de miocardio o accidente cerebrovascular del exfumador es el mismo que el de alguien que no haya fumado nunca.
- Mejora la respiración y reduce el cansancio.
- Disminuye la predisposición a toser y contraer infecciones.
- La piel y el rostro se recuperan del envejecimiento prematuro.
- Se recobra los sentidos de gusto y olfato.
- El deterioro de la función pulmonar se ralentiza.