Casi el 14% de los mayores de 18 años que residen en España tiene diabetes tipo 2, afirma el Estudio di@bet.es. Y la consecuencia principal para el organismo es que este puede verse afectado negativamente de distintas formas. Entre esos posibles daños está el que puede sufrir la salud cardiovascular. Por eso la diabetes se considera un factor de riesgo cardiaco.
La razón es que influye en el desarrollo de la aterosclerosis y, cuando afecta a las arterias coronarias, provoca cardiopatía isquémica. Además, en las personas diabéticas puede disminuir la capacidad de contracción del miocardio, por lo que es posible desarrollar insuficiencia cardiaca. ¿Qué hacer entonces para evitar esta enfermedad caracterizada por el aumento del nivel de azúcar en sangre debido a un defecto en la secreción o en la acción de la insulina, que es la hormona encargada de regular la glucosa en sangre?
En la aparición de la diabetes tipo 2 influyen factores ambientales como la obesidad, el sedentarismo y la alimentación inadecuada, lo que significa que si combatimos los factores de riesgo que la provocan podemos evitar la aparición de esta tipología. Por eso es recomendable seguir estas orientaciones médicas:
- Tener una alimentación saludable y equilibrada. Seguir la dieta mediterránea es una de las principales herramientas con las que contamos para cuidar nuestra salud. Así, debemos evitar consumir carnes muy grasas o sustituirlas por carnes magras, no olvidarnos de incluir en el menú verduras, hortalizas, legumbres y pescados, y también reducir el consumo de azúcares.
- Practicar deporte de forma frecuente. El sedentarismo es una de las causas de la aparición de la diabetes tipo 2, por lo que un eficaz instrumento para prevenir la enfermedad es el ejercicio, siempre que lo practiquemos varios días a la semana.
- Dejar de fumar. Abandonar el tabaco es igualmente una buena estrategia para evitar la aparición de la diabetes ya que se calcula que los fumadores tienen entre un 30 y un 40% más de probabilidades de padecer diabetes tipo 2 que los no fumadores.
Cómo controlar la enfermedad
¿Qué ocurre con quienes ya padecen la enfermedad? El principal mensaje del colectivo médico es que su pronóstico depende en gran medida de los propios pacientes. Deberán mantener unos hábitos de vida saludable similares a los que podemos poner en práctica para no padecer la enfermedad: no fumar, evitar el sedentarismo y conseguir un peso normal. Pero a estas recomendaciones se suman otras como las de seguir las indicaciones farmacológicas del médico y acudir a las consultas programadas.
Como indica la World Heart Federation, mantener a raya la diabetes puede reducir hasta en un 42% la probabilidad de padecer una enfermedad cardiovascular y en un 57% el riesgo de infarto, ictus o muerte por causa cardiovascular. Por esa razón es importante mantener controlada la enfermedad.